El origen del maltrato animal —someterlos a condiciones extremas que los llevan a la muerte— está en una psicopatía o sociopatía de la persona que lo lleva a cabo. Por ello, cuando a María Consuelo se le sorprendió consumiendo y vendiendo carne de perro en la ciudad de Puebla, en 2019, se le tuvo que haber retirado la patria potestad de sus dos hijos varones.